La capacidad de concebir y sostener un embarazo puede verse significativamente influenciada por la alimentación. En Uruguay los nutricionistas especializados en fertilidad desempeñamos un papel clave ayudando a personas y parejas a mejorar su salud reproductiva a través de cambios estratégicos en el estilo de vida y alimentación.
La relación entre dieta y fertilidad
Una nutrición adecuada es esencial para la buena salud reproductiva. Nutrientes como el ácido fólico, el zinc y las vitaminas del grupo B entre otros, son fundamentales para optimizar la fertilidad.
Factores dietéticos clave en la fertilidad
- Regulación de la glucosa y la insulina: Las fluctuaciones en los niveles de glucosa y la resistencia a la insulina pueden afectar directamente la fertilidad. Adoptar una alimentación planificada para tu individualidad, que sea baja en azúcares refinados y rica en fibras puede mejorar la respuesta hormonal y la calidad de los óvulos y el esperma.
- Equilibrio del colesterol: El colesterol influye en la producción de hormonas sexuales, que son clave para procesos reproductivos. Una dieta rica en grasas saludables y baja en grasas trans y saturadas puede optimizar estos niveles.
- Gestión del peso y la composición corporal: El sobrepeso u obesidad pueden afectar la fertilidad al causar desbalances hormonales que afectan la ovulación. Una nutricionista puede acompañar a los pacientes en la pérdida de peso efectiva, saludable y sostenible.
Estrategias dietéticas específicas
- Planificación de comidas: Consumo regular de alimentos integrales, proteínas magras y vegetales. Es importante incluir una variedad de alimentos para asegurar una ingesta completa de nutrientes esenciales.
- Suplementos nutricionales: Incluir suplementos de ácido fólico, zinc y selenio, que son vitales para la salud reproductiva, especialmente cuando no se alcanzan las cantidades recomendadas a través de la dieta. Es fundamental evaluar este aspecto en consulta nutricional, ya que un exceso de algunos nutrientes también podría aumentar el estrés del organismo y afectar la fertilidad.
- Reducción de inflamación: Incorporar alimentos ricos en antioxidantes para combatir la inflamación, que puede afectar la salud reproductiva. Alimentos como frutas de diferentes colores, nueces, semillas y verduras de hoja verde son excelentes fuentes.
Consejos adicionales
- Hidratación: Mantener una buena hidratación es esencial para la salud reproductiva. El agua ayuda a transportar nutrientes esenciales a las células y puede mejorar la calidad del moco cervical, facilitando la movilidad de los espermatozoides.
- Reducir la exposición a toxinas: Reducir la exposición a toxinas ambientales y alimentarias, como el BPA y los pesticidas, es importante, ya que pueden afectar negativamente la fertilidad tanto en hombres como en mujeres.
La alimentación juega un papel esencial en la fertilidad. Con la orientación de un nutricionista especializado en fertilidad podés optimizar tu alimentación para mejorar las posibilidades de concebir y sostener un embarazo saludable. Un enfoque dietético bien planificado y personalizado no solo mejora la fertilidad, sino que también contribuye al bienestar general y a llevar un embarazo más saludable.
Si tienes cualquier duda, no dudes en contactarme.
Lic. Lorena Ernst – Nutricionista especializada en Uruguay.